Un vídeo muestra como una máquina logra absorber agua del aire en medio del desierto con la energía del sol. El resultado es increíble, un agua totalmente cristalina que puedes beber de inmediato.
La revista Science Advances publicó el pasado 8 de junio el resultado de una investigación que podría cambiar la realidad de los países con pobreza hídrica. El equipo liderado por el químico Omar M. Yaghi, profesor de la cátedra James and Neeltje Tretter de Química en la Universidad de California en Berkeley, se trasladó al árido estado de Arizona (Estados Unidos) en octubre de 2017 para poner a prueba su prometedora invención, un prototipo de “cosechadora de agua” que absorbe el agua del aire usando la energía solar.
La cosechadora es una caja que contiene otra caja dentro, ambas transparentes. La caja interna queda abierta por la noche y contiene granos absorbentes de agua conocidos por las siglas MOF que recogen la humedad del exterior durante la noche. Durante el día, la caja permanece cerrada para que se caliente y los granos de MOF expulsen el agua. El agua condensada cae en la parte inferior de la caja externa para ser recolectada.
Fotografía: Stephen McNally para News.berkeley.edu
Los MOF son granos porosos de un material llamado compuesto orgánico-metálico que se fabrica con circonio de metal. Cuando este se calienta, libera lo retenido. Por cada kilogramo de MOF, se pueden absorber siete onzas de agua, aproximadamente. Yaghi ideó, además, un producto 150 veces más económico a partir del aluminio que es capaz de retener el doble de cantidad de agua, aproximadamente una taza y media por día por kilo de MOF.
Para obtener más cantidad de agua, basta con agregar más del producto; al menos eso se destacó luego de las pruebas. Los resultados también indicaron que se puede extraer agua todos los días y las noches con baja humedad y a un precio asequible.
Yaghi, el líder del equipo investigador, fue quien inventó esta manera de absorber el agua del ambiente y dijo a News.berkeley.edu que “no hay nada como esto” porque “funciona a temperatura ambiente con luz solar ambiental y, sin energía adicional, puede recoger agua en el desierto”. Él y su equipo están orgullosos por haber conseguido que la recolección de agua se convirtiera en una ciencia.
Esta investigación y sus pruebas de campo han demostrado que la cosechadora de última generación funciona bajo distintas condiciones de humedad, temperatura e intensidad solar. "Ha habido un gran interés en comercializar esto y hay varias nuevas empresas que ya participan en el desarrollo de un dispositivo comercial de recolección de agua", dijo Yaghi, quien está trabajando desde ya con el gobierno de Arabia Saudita.