¿Es un animal o un vegetal? Esto es lo que se preguntaban los desconcertados lugareños del sur de Vietnam cuando apareció esta misteriosa criatura. En las imágenes se observa un extraño ser de color marrón oscuro con cientos de tentáculos que se retuerce tras ser capturada por un guía turístico en la provincia de Kien Giang.
El hombre que la recogió, Du Nam Du, la colocó en una mesa verde para verla más de cerca. Todos los presentes se quedaron igual de asombrados al ver la extraña figura y sus movimientos. “No sé si es un animal, vegetación o algo más”, indicaba Du Nam Du. Uno de los lugareños llamado Kim dijo, “Es un monstruo. Un día volverá del océano y será diez veces más grande”.
La criatura tiene forma de estrella y cuenta con decenas de tentáculos que salen desde el centro del cuerpo. A muchos le recordaban a la criatura de la fantástica serie de Netflix, Stranger Things. Una especia extraterrestre que llegaba a la Tierra a través de un portal de dimensión alternativa. Sin embargo, para no acabar como el triste final que corrieron algunos personajes de la serie, la misteriosa criatura fue lanzada más tarde de vuelta al océano.
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La atracción de los ‘globsters’
Cada cierto tiempo se repite la historia. El mar nos regala criaturas de aspecto desconocido que generan una mezcla de miedo supersticioso y fascinación. Con frecuencia esos hallazgos se vuelven virales.
Basta repasar los timelines recientes para encontrarse con ‘globsters’ famosos, como el que avistaron hace poco unos pescadores en la bahía de St. James, en Alaska. “Tenía los ojos del tamaño de platos de la cena”.
Los científicos de la Administración Nacional Oceánica acabaron revelando que la criatura era una ballena jorobada.
Globster encontrado en Alaska
Otro ‘globster’ que causó sorpresa en el año 2017 fue el encontrado en el norte de la isla de Seram en Indonesia. Su tamaño era de alrededor 15 metros de largo y al principio también se pensó que era un calamar gigante. No obstante, Alexander Werth, un biólogo especializado en ballenas que trabaja en la Universidad Hampden de Sidney y George Leonard, científico en el Ocean Conservancy, aseguraron que se trataba de una ballena barbada.
Los científicos indican que este fenómeno se produce por el aumento de la temperatura del mar. Las bacterias que se alimentan de los cadáveres de las ballenas y de otros animales acuáticos hacen que se propaguen más rápido con el calor. Estas bacterias llenan al cadáver de gases a medida que se descompone, lo que hace que flote.