PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo Nicole Kidman: “Casarme con Tom Cruise me libró del acoso sexual en Hollywood” Culture

Culture

Nicole Kidman: “Casarme con Tom Cruise me libró del acoso sexual en Hollywood”

H

 

“Me casé por amor, pero estar casada con un hombre extremadamente poderoso me libró de ser acosada sexualmente”

Elena Rue Morgue

16 Octubre 2018 13:29

De esta entrevista para The Cut que la periodista Holly Millea ha redactado dándole a Nicole Kidman la fuerza que da la primera persona, todos los titulares se han hecho eco de lo mismo: la actriz de 51 años está segura de que estar casada con Tom Cruise la protegió del acoso sexual que tan arraigado en Hollywood.

“Me casé muy joven (a los 22), pero definitivamente eso no supuso poder para mí — fue protección. Me casé por amor, pero estar casada con un hombre extremadamente poderoso me libró de ser acosada sexualmente. Funcionó, pero prácticamente viví dentro de una crisálida. Así que cuando salí de ella a los 32 o 33, fue casi como si tuviese que crecer”.

Kidman, sin entrar en detalles, trata uno de los aspectos más dramáticos de ser mujer en una sociedad en la que el acoso y el abuso sexual son la norma, y no excepciones en forma de hombres encapuchados en portales de madrugada. ¿Cómo de jodido es curtirte para ser una mujer independiente y tener que sentir la protección que debería tener una niña pequeña porque el mundo no te está dejando otra?

Kidman explica en la entrevista que empezó a caminar sola muy pronto: a los 19 compró su primer apartamento con todos sus ahorros. Era pequeño, dormía en el suelo, pero era suyo. Su logro. Su espacio. Tres años después, casada con uno de los actores más poderosos del momento, su seguridad estaba determinada por la posición de poder de su pareja.

Ella, la chica que ahorró desde la adolescencia para tener una casita para ella sola, a su nombre, era entonces consciente de que el respeto que muchos hombres sin escrúpulos le estaban manteniendo no era hacia ella, sino a su marido. No era a ella como persona, sino como pertenencia de otra más importante y con la voz más grave.

Aunque Kidman no quiera explicar todo lo que le ha pasado desde niña, nos deja a todos claro que a ella (como a todas) le ha pasado.

Claro que he tenido momentos #MeToo — ¡desde que era pequeña! Pero, ¿quiero exponerlos en un artículo? No. ¿Salen en mi trabajo? Absolutamente. Soy abierta y cruda. Quiero aprovechar mi experiencia y emoción, y no solo estoy hablando de acoso sexual. Estoy hablando de pérdida, de muerte, de todo lo que forma parte de la vida”.

Y no querer hablar de ello como lo han hecho otras actrices no la hace ni mejor ni peor que ninguna de ellas. Compartir este tipo de trauma no es una obligación, no hay un manual de cómo se lucha contra el abuso, o cómo se apoya a otras mujeres en su lucha.

Contando lo poco que ha contado, Kidman ya ha dicho mucho: en Hollywood — y fuera — las mujeres seguimos en demasiadas ocasiones dependiendo de la protección de hombres para poder sentirnos seguras, y si alguien tiene el coraje de decir que hemos conseguido igualdad cuando eso está pasando cada día, es que efectivamente la igualdad le importa un pepino.

Somos mujeres, no bebés, y no tendríamos que ir de la mano de nadie para poder caminar sin miedo.

share