¿Qué es la Biblioteca de Mujeres? Es el trabajo de toda una vida de Marisa Mediavilla, pero es también un proyecto político de envergadura que permite conservar una genealogía de la literatura femenina española y sus feminismos literarios
Hay luchas que no pueden abandonarse. Aunque a veces el pesimismo nos presione íntimamente, historias como la de Marisa Mediavilla nos zarandean y nos insuflan con la pasión y la rabia necesarias para continuar, para retomar su batalla y hacerla también nuestra.
¿Quién es Marisa Mediavilla? Como explicó en sus redes sociales Carmen G. de la Cueva, editora de La señora Dalloway, Marisa es una mujer que lleva desde 1985 reuniendo libros escritos por mujeres, publicaciones feministas y tebeos, agrupándolos y catalogándolos para constituir lo que llamó Biblioteca de Mujeres de Madrid.
El proyecto empezó a gestarse tras la muerte de Franco, cuando Marisa era bibliotecaria, y decidió zambullirse en este trabajo imposible para que la tradición literaria femenina y feminista que estaba sobreviviendo precariamente en los intersticios de la cultura oficial pudiese estar disponible para las generaciones venideras.
Esta empresa, que empezó con Marisa comprando libros en el Rastro, ha llegado a erigirse en una colección que consta ya de más de 25.000 volúmenes y es el testimonio único de un continente desaparecido: cubre un amplio abanico de publicaciones improbables –descatalogadas, ediciones locales, rarezas que no llegaron a los grandes catálogos– que se extiende desde obras del XIX y del primer tercio del siglo XX hasta hoy.
Sin embargo, este milagro que es la Biblioteca de Mujeres sigue sin ser reconocido: el Instituto de la Mujer todavía no ha proporcionado un espacio para poder instalar todo el material.
La Biblioteca ha llevado una existencia nómada. A medida que el fondo crecía, iba cambiando de sede por pura necesidad. Desde 2012, la Biblioteca de Mujeres se encuentra en el sótano del Museo del Traje, en Madrid, y la necesidad de un nuevo hogar no se debe solamente a la falta de espacio, sino a las condiciones lamentables en las que se encuentra: los libros están tirados en cajas, entre polvo y humedad.
Por todo ello, este sábado 27 de mayo, a las 13h, se ha organizado un acto en la carpa central del a Feria del Libro de Madrid, para reclamar un nuevo espacio para la Biblioteca de Mujeres, que constará de una mesa redonda –con la presencia de Marisa Mediavilla– y un recital poético.
Para hacer de la convocatoria un éxito, y poder las redes se han llenado de mensajes de apoyo para hacer de la convocatoria un éxito. Unos mensajes que reclaman, como no podía ser de otro modo, un cuarto propio para la Biblioteca.
Porque tantos años después de que Virginia Woolf planteara su reivindicación, para las mujeres –para su historia, para su genealogía– el problema sigue siendo el mismo: la posibilidad de disponer de un espacio propio.
