PlayGround utiliza cookies para que tengas la mejor experiencia de navegación. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.

C
left
left
Artículo El mayor estudio de la historia concluye que el ‘gen gay’ no existe Now

Now

El mayor estudio de la historia concluye que el ‘gen gay’ no existe

H

Photo by Levi Saunders on Unsplash
 

Ninguna variante genética puede predecir el comportamiento homosexual

PlayGround

30 Agosto 2019 22:16

En 1993, un equipo de investigadores liderado por Dean Hamer descubrió un tramo de ADN que, dijeron, creían que estaba vinculado a la homosexualidad masculina. Desde entonces, el concepto de 'gen gay' ha sido objeto de controversia tanto en los medios de comunicación como en la comunidad científica, inspirando decenas de investigaciones posteriores.

Ahora, el mayor estudio realizado nunca sobre la influencia de la genética en el comportamiento sexual, descarta la existencia de dicho 'gen gay' y aporta nuevos datos a la discusión.

“Nuestra investigación muestra que no hay un único gen gay, sino más bien muchísimos genes que influyen en la probabilidad de que una persona tenga parejas del mismo sexo”, explica el genetista Brendan Zietsch, director del Centro de Psicología y Evolución de la Universidad de Queensland, en Australia.

El estudio, publicado en la revista Science, ha estudiado el ADN y el historial sexual de cerca de medio millón de personas (mayoritariamente blancas) de ambos sexos. La muestra es cien veces mayor que el mayor trabajo previo. Y la conclusión principal es que, aunque existen ciertas asociaciones entre la genética y la actividad sexual, los factores ambientales juegan un papel más importante.

Los autores lo comparan, de hecho, con los factores que determinan la altura de una persona, en la que intervienen múltiples factores genéticos y ambientales.

“En este caso, la palabra ambiental solo significa que no son influencias genéticas. No tiene por qué ser nada relacionado con la educación o la cultura. Podrían ser efectos biológicos no genéticos o el ambiente prenatal en el útero. Nuestro estudio no arroja luz sobre estas influencias”, subraya Zietsch.

— Vídeo relacionado —

En la primera parte del estudio, los investigadores estudiaron los datos de unas 500.000 personas recolectados a través del proyecto Biobank del Reino Unido. Alrededor del 4% de los hombres y casi el 3% de las mujeres dijeron que alguna vez habían mantenido una relación sexual con una persona del mismo género.

A partir del análisis de su comportamiento sexual y el de sus parientes cercarnos -primos como mínimo-, estimaron que un tercio de la variación en el comportamiento homosexual puede explicarse por la genética. Algo que concuerda con estudios anteriores, que la cifraban entre un 30% y un 50%.

En la segunda parte, el equipo se fijó en las variantes genéticas que pudieran estar de detrás de esta conexión. Los investigadores encontraron cinco variantes genéticas -es decir, pequeñas diferencias en el ADN- que ofrecían un enlace claro con el comportamiento homosexual. Pero, aún sumándolas, estas cinco variantes tendrían un efecto muy pequeño -alrededor del 1%-, estando lejos de ser predictivas.

El estudio también ha descubierto que existe una correlación entre la predisposición genética al comportamiento homosexual y algunos rasgos de la personalidad como la apertura a nuevas experiencias, el sentimiento de soledad, el comportamiento de riesgo, que teóricamente podría incluir la exploración sexual, y la predisposición a los problemas de salud mental, que son desproporcionadamente comunes en la comunidad LGBTQ.

“Una posibilidad es que el estigma asociado a la homosexualidad provoca o exacerba los problemas de salud mental. Esto podría crear una correlación genética ”, dice Zeitsch.

Los autores del estudio explican que sus descubrimientos ponen en cuestión que la sexualidad exista en una única escala.

“Los resultados sugieren que no deberíamos medir la preferencia sexual en un solo continuo de heterosexual a homosexual, sino más bien dos dimensiones separadas: atracción por el mismo sexo y atracción por el sexo opuesto”.

— Vídeo relacionado —

El estudio también tiene limitaciones, como reconocen sus propios autores. Entre ellas, el hecho de que toda la información provenía de testimonios personales que podían estar sesgados, que se basa únicamente en personas de ascendencia europea y que el rango de edad de los participantes no refleja completamente el de la población en general.

El mensaje final con el que los investigadores creen que debemos quedarnos es que “el comportamiento sexual diverso es una parte natural de la variación humana general”.

share