La psicología de un troll de internet

Los vemos todos los días; escondidos bajo largos nicks, refugiados en fotos de perfil vacías, atacando a quien se cruce en su feed. Los trolls están cada vez más presentes en las redes y no necesitas ser famoso o ser tener un cargo público para ser víctima de su toxicidad. ¿Qué los motiva a tomarse el tiempo de atacar a extraños? A continuación te presentamos algunas teorías que expertos en el comportamiento humano han desarrollado para tratar de explicar lo que mueve a los trolls.

Empecemos por definir a un troll. Según la Universidad de Lancaster, un troll es “una persona que aparenta un deseo sincero de formar parte de una comunidad, pero cuya intención real es solamente irrumpir en la conversación o conseguir exacerbar un conflicto, con el único propósito de entretenerse”.

Pero no hay un solo tipo de troll o hater en internet. Según las investigadoras Bárbara Lopes y Hui Yu, existe una llamada “Tríada de personalidades oscuras”, que influencian el mal comportamiento online: la psicopatía, el narcisismo y el maquiavelismo. Así actúa cada una de ellas en nuestro día a día:

Psicópatas: Es la personalidad online más maliciosa de las tres. Son impulsivos, buscan todo el tiempo emociones fuertes y no sienten remordimiento por sus actos. Son como ese villano de película que nunca entendés por qué se empeña tanto en matar al héroe. Tienen una motivación sádica que los lleva a perjudicar al resto y sienten placer cuando lo logran. En general buscan víctimas débiles y vulnerables, con una autoestima baja que los convierte en personas fácilmente manipulables.

Narcisistas: Al narcisista le gusta ante todo llamar la atención. Es el típico canchero de Twitter que muestra ideas de grandeza y de ventaja personal, buscando la admiración de otros usuarios. Su motivación no es necesariamente dañar a desconocidos, sino compararse con otros para seguir inflando su ego virtual.

Maquiavélicos: Estos son los más difíciles de detectar, sobre todo detrás de la pantalla. Son manipuladores y pueden desarrollar comportamientos antisociales que los lleven a hacer lo que sea. Los motiva nada más que su bienestar personal y son capaces de engañar y traicionar a otros con tal de cumplir sus metas. Tanto los narcisistas como los maquiavélicos desarrollan comportamientos de bullying para obtener una ventaja personal, a diferencia de los psicópatas, que muchas veces lo hacen solo por diversión (¿Te imaginás al Joker con Instagram o comentando en YouTube?).

Pero, ¿cómo son en la vida real? ¿Actúan así solamente detrás de sus pantallas?

Según la socióloga Carolina Pallardó, los que se comportan así en internet también actúan de manera similar en la vida real. “Este tipo de personas acosadoras se definen como trolls en internet pero en la vida de las relaciones físicas personales (realidad offline), serían definidos como lo que son: personas machistas, homófobas, racistas…”. Es decir, también convivimos con ellos a diario, solo que los llamamos diferente.

No todos los trolls son iguales en esta selva que es internet. Lo importante es detectarlos a tiempo y evitarlos. Las discusiones en internet con trolls suelen ser poco fructíferas, y tienden a contagiarnos su actitud. Para no caer en la agresividad existen distintas técnicas psicológicas que te permitirán llevar adelante un intercambio positivo. Algunas de las más útiles son el “Aplazamieno asertivo”, que consiste básicamente en no responder “en caliente” y esperar a calmarnos para dar nuestro argumento; el “Banco de Niebla” que consiste en dar la razón a la otra persona en lo que consideres que pueda tener de cierto su opinión o crítica, pero negándose a entrar en discusiones más detalladas; o la famosa e infalible técnica de “Ignorar”.

Pero, para terminar, si hay algo que odia un hater, es que le respondas sus kilométricos insultos con un simple ❤️.

#iloveuhater