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El espectacular descenso que ha fijado un nuevo récord mundial de inmersión vertical a pulmón libre

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Así batió el récord mundial de apnea la italiana Alessia Zecchini: 107 metros de profundidad y cuatro minutos bajo el agua, sin respirar

Playground community

02 Octubre 2018 20:20

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Seguro que alguna vez has probado a calcular cuánto tiempo aguantas sin respirar debajo del agua. ¿30 segundos? ¿50? ¿Minuto y medio? ¿Dos minutos? Para los apneístas eso es pan comido. Su cuerpo funciona a otro nivel.

Natalia Molchanova, la leyenda rusa del buceo libre, era capaz de aguantar 9 minutos sin respirar. Sin llegar a tanto, la italiana Alessia Zecchini batía recientemente el récord mundial de inmersión vertical a pulmón libre bajando hasta los 107 metros de profundidad.

El vídeo que encabeza estas líneas recoge esa hazaña. Zecchini bucea con calma hasta alcanzar la cota deseada y luego vuelve a la superficie con una impresionante técnica corporal. Con sólo 26 años esta italiana originaria de Roma consiguió superarse a sí misma al añadir cinco metros más su récord del año pasado (récord que en julio le había arrebatado la japonesa Sayuri Kinoshita), siendo la primera mujer en descender más allá de los 100 metros.

Las imágenes se grabaron en Deans Blue Hole, en las Bahamas, durante el Campeonato de Inmersión VB 2018 celebrado en julio. Zecchini participó en una categoría conocida como CWT (apnea de peso constante por sus siglas en inglés), donde los apneístas pueden utilizar sus brazos siempre que no toque la cuerda que les guía hacia el fondo.

Como no era suficiente, hace pocas semanas Zecchini ha vuelto a marcar el mismo record de 107 metros durante el torneo que abre el Campeonato Mundial CMAS. Esperemos que en las Naciones Unidas tengan en cuenta a esta atleta del océano cuando hagan el recuento de "mujeres deportistas increíbles".

Vídeo relacionado:

Alessia Zecchini lleva buceando desde que tenía 11 años y dio su primer curso de buceo a pulmón con sólo 13. “Desde que era pequeña me ha gustado nadar y siempre intentaba adentrarme en el mar durante las vacaciones”, comenta la campeona. Este año se siente muy contenta con su rendimiento, aunque piensa seguir adentrándose cada vez más en las profundidades del océano.

Pero ¿qué se siente al sumergirse a tanta profundidad?

“Intento no pensar en nada, sólo me concentro en lo que estoy haciendo y trato de percibir sólo los sentimientos positivos”

Alessia Zecchini

El arte de no respirar

Como casi todo en esta vida, mejorar los tiempos de resistencia en la apnea es pura práctica. Cuando uno aguanta la respiración disminuye la concentración de O2 en el cuerpo (hipoxia) mientras aumenta el CO2 (hipercapnia), por eso cuanta más cantidad de aire seamos capaces de retener en los pulmones, más tardaremos en entrar en la fase de hipoxia/hipercapnia.

Aunque en primera instancia la capacidad pulmonar está ligada al tamaño de cuerpo, los apneístas son capaces de absorber hasta dos litros de aire más que otras personas con su misma envergadura corporal. Para ello entrenan tanto la musculatura inspiratoria como la flexibilidad pulmonar.

Pero además de la capacidad pulmonar, los apneístas utilizan distintas técnicas para oxigenar todo el cuerpo, reducir el consumo total de oxígeno, o para inflar sus pulmones a presión como cuando inflamos las ruedas de la bicicleta (llamado insuflación glosofaríngea o “carpa”). Esta técnica se ejecuta una vez realizada la inspiración máxima y con los pulmones completamente llenos. Consiste en ir aspirando más aire a bocanadas para luego bombearlo hacia las vías respiratorias presionándolo con la lengua contra el paladar.

Con esta técnica, los apneístas son capaces de incrementar su capacidad pulmonar total en hasta 2 litros. Sin embargo, los profesionales tienen cuidado al utilizar estas técnicas, pues la presión que ejercen unos pulmones a rebosar sobre las arterías puede provocar mareos o desmayos. ¡Así que no lo intentes en casa!

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