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Artículo 'ASC Versace' revela lo que realmente mató al diseñador: la homofobia institucionalizada Culture

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'ASC Versace' revela lo que realmente mató al diseñador: la homofobia institucionalizada

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La policía tenía pruebas suficientes para atrapar a Andrew Cunanan antes de que asesinara a Versace. Sin embargo, prefirió mirar para otro lado

Rubén Serrano

30 Marzo 2018 17:44

Cuando se estrenó American Crime Story: Versace intuíamos que la serie iba a repasar el homicidio de Gianni Versace y que se centraría en su figura como uno de los diseñadores más importantes de las últimas décadas. Sin embargo, si por algo se caracteriza su creador Ryan Murphy, es por no ser predecible. Los verdaderos protagonistas de la ficción son Andrew Cunanan, el hombre que le quitó la vida al italiano, y los motivos que le llevaron a hacerlo.

Durante nueve capítulos, los espectadores nos preguntamos por qué la policía no detuvo a tiempo a este asesino en serie mientras que nos enfadamos y nos entristecemos por la discriminación que sufre constantemente el colectivo gay. Asi, conforme avanza la trama, entendemos por fin que el verdadero plan de Murphy habia sido convertir ACS: Versace en una retrospectiva de la homofobia que impregnaba la sociedad estadounidense durante los años 90.

Andrew Cunanan mató de dos disparos a Versace el 15 de julio de 1997 en la puerta de su casa de Miami. No obstante, el fundador de la conocida firma de lujo no fue su primera víctima y eso las autoridades lo sabían. Tan solo unos meses antes de su muerte, entre abril y mayo, Cunanan había asesinado a otros cuatro hombres, entre ellos a un examante y a un amigo. Estos homicidios lo convirtieron en una de las 10 personas más buscadas por el FBI pero, a pesar de ello, nunca lograron capturarlo ya que se suicidó ocho días después de matar al diseñador.

Jeff Trail, David Madson, Lee Miglin, William Reese y Versace, las víctimas de Cunanan.

Cunanan había dejado pruebas que lo implicaban directamente con esos cuatro crímenes, como restos de ADN, prendas de ropa o la utilización de su nombre y dirección real en todos sus movimientos. El joven, procedente de una de familia de inmigrantes filipinos, no hizo nada por pasar desapercibido ante las autoridades: robó el coche y objetos personales de varias víctimas y se paseaba tranquilamente por la calle tras cometer los asesinatos. Como bien señala Ronnie, uno de los personajes de la serie, “Andrew quiere que lo vean, Andrew no se esconde”.

A pesar de disponer de infinitud de datos y conexiones, la policía nunca volcó todos sus esfuerzos en atrapar a Cunanan e impedir así que matara también a Versace. Es más, los agentes le quitaron importancia al caso como si el hecho de que un hombre gay que asesinaba a otros hombres en su mayoría también gais fuera un crimen de categoría inferior. Con esta serie, Murphy señala algo evidente que, sin embargo, no quiere que pase desapercibido: la homofobia institucionalizada contribuyó en el asesinato de Versace.

Para una de las productoras ejecutivas de la serie, Nina Jacobson, si las víctimas hubieran sido “heterosexuales probablemente lo habrían frenado antes y Versace no habría muerto”. El actor Darren Criss, que interpreta al asesino, apuntaba a The Hollywood Reporter que el desconocimiento y los prejuicios que los agentes tenían sobre la comunidad gay hizo que miraran el caso de Cunanan por encima del hombro y que no lo priorizaran hasta que acabó con la vida de una celebridad: “Había tanta incomprensión dentro de la policía que el asunto se escapó entre las rendijas del sistema”.

Darren Criss interpreta a Cunanan en ACS:Versace.

American Crime Story muestra también cómo los personajes tuvieron que hacer frente a un ambiente que se mostraba hostil con ellos. Los familiares, amigos y compañeros de clase de Cunanan lo rechazaban por ser gay y eso provocó en él una homofobia interiorizada. Consecuentemente, mientras negaba a su familia que se sentía atraído por el sexo masculino, a sus espaldas quedaba con hombres mayores que en varias ocasiones terminaron pagándole por sus servicios.

La misma discriminación que Cunanan sintió en su círculo de personas cercanas, la sufrieron otros personajes en el ámbito laboral, en concreto Jeff Trail, su primera víctima y también su amigo. No es de extrañar que la historia de este joven, una de las más dolorosas de la serie, guarde similitudes con las experiencias de muchos espectadores homosexuales que, en algún momento de sus vidas, se vieron obligados a hacer lo mismo que hizo él.

Trail trabajaba en la armada estadounidense y tuvo que esconder su orientación sexual para conservar su puesto de trabajo. Su caso critica la polémica medida Don’t ask, don’t tell (Ni preguntes, ni lo cuentes) que Bill Clinton implantó en 1994 y que permitía a hombres gais y mujeres lesbianas trabajar en el ejército del país siempre que no hicieran pública su sexualidad. A cambio de guardar silencio y de no levantar sospechas no serían investigados ni tampoco serían expulsados.

American Crime Story hace alusión a una entrevista que Trail dio para la CBS en la que contó lo que implicaba ser gay en las fuerzas armadas de EE.UU. Esta conversación existió en la realidad y se emitió en 1993. En ella, el teniente ocultó su rostro y tan solo permitió que se hiciera visible su silueta. “Nada me gustaría más que encender la luz y mostrarte quién soy pero no me permiten hacer eso. Le guste o no a la gente en el ejército hay gais. Hacen su trabajo y lo hacen bien”, explicó para la cadena.

A pesar de lo que pueda parecer, para Gianni Versace no siempre fue fácil vivir su sexualidad de forma libre. Como evidencia la serie, su hermana Donatella (interpretada por Penélope Cruz) temía que si su hermano hacía pública su homosexualidad la noticia afectase a las ventas de la empresa y a la relación con los inversores.

Finalmente, el diseñador salió oficialmente del armario dos años antes de fallecer en una entrevista que concedió a The Advocate en 1995. En ella presentó al que fue su novio durante 15 años, Antonio D’Amico, y al que Ricky Martin da vida en la producción. “Soy un hombre gay que ha vivido durante años en el armario. Ver a Gianni hablar sobre eso con un periodista me conmovió. El hecho de que no pudo ser tan abierto como yo lo soy ahora mismo es algo que me frustra”, contó a Us Weekly.

No obstante, la sexualidad de Versace era algo conocido por todo el mundo y, sin duda, algo que influyó tanto en su trabajo como en las campañas homoeróticas que realizaba. Con su mera presencia y con su fama a nivel mundial, el diseñador fue uno de los pocos que se atrevió a desafiar la homofobia existente.

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