“Cuando te metes en el dormitorio de alguien tienes que saber a dónde te puede llevar esa situación”
Morrissey está en plena campaña de promoción de su nuevo LP Low in High School y, como no podía ser de otro modo, el que fuera líder de The Smiths está dejando tras de sí esos ex abruptos que tanto sus fans como sus detractores conocen tan bien. Los más explosivos hasta la fecha los ha esgrimido en Spiegel Online, una publicación alemana donde Moz fue preguntado por temas como Trump, el Brexit...
… o el #MeToo.
“Aquello se convirtió en un circo”, opina el cantante, sobre una iniciativa que nacía para compartir públicamente casos particulares de violencia sexual. “De repente, todo el mundo es culpable. Cualquier tipo que le haya dicho a una mujer “me gustas” es acusado de repente de acoso sexual”, frivolizaba el cantante británico.
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“Si no le puedo decir a alguien que me gusta, ¿se supone que tiene que adivinarlo?”, añadía.
“Hay casos extremos, por supuesto: la violación es asquerosa; cualquier ataque físico es repulsivo”, continuaba. “Pero creo tenemos que analizar las cosas en términos relativos”.
Relativizar la agresión. Como él mismo decía al frente de The Smiths, el bocazas ataca de nuevo.
El discurso se tensa más cuando empiezan a salir nombres propios: sobre la violación de Kevin Spacey a un menor, Morrissey dice que la versión de la víctima no le parece muy creíble. “Cuando te metes en el dormitorio de alguien, tienes que saber a dónde te puede llevar esa situación”. Para el artista pop, Kevin Spacey había sido “atacado (por la prensa) sin necesidad alguna de ello”.
¿Puede empeorar la cosa? Que entre Harvey Weinstein. “La gente ya sabía lo que había”, dice, refiriéndose a las víctimas del productor hollywodiense. “Ahora todas dicen: fui atacada por sorpresa, me obligó a entrar en su habitación. Pero, cuando todo iba según lo previsto y ellas conseguían labrarse una carrera, jamas hablaban del tema”.
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“Odio la violación. Odio los ataques. Odio las situaciones sexuales en las que se fuerza a alguien”, aclara. “Sin embargo, hay ciertos casos que me hacen pensar sobre cuán equivocada está la persona que se refiere a sí misma como víctima. Desde siempre, en el rock ha habido músicos acostándose con sus groupies”, concluía. “Si revisas la Historia, casi todo el mundo es culpable de haber dormido con menores alguna vez en su vida”.
Que aquí siempre hemos hecho las cosas aquí, vaya.
Morrissey parece más desatado que nunca, y quizás sea para desviar la atención del problema de fondo: Low in High School es el trabajo más decepcionante de su carrera en solitario; tan solo Who will protect us from the police? se libra de la pira. La pregunta que debemos hacernos ahora es: ¿Quién nos protegerá a nosotros de Morrissey?