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Alexander McQueen, el diseñador que convirtió sus traumas en arte sobre la pasarela

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Getty.
 

Alexander McQueen se suicidó en 2010, pero su sombra sigue siendo alargada. Ahora, un documental explora su tormentosa vida

Elena Rue Morgue

07 Junio 2018 16:47

Desde su trágico suicidio en 2010 la noche antes del funeral de su madre se han escrito dos biografías sobre Alexander McQueen, un musical y se ha iniciado el proyecto de una película, pero...¿quién mejor para contar su historia que el propio Alexander McQueen?

“Si el tema a tratar es tan increíble y tienes las imágenes, el soporte visual y las historias que contar, creo que el documental es mejor que un biopic porque no hay nadie mejor que las personas reales para contar la historia”, explicó Ian Bonhôte a Harper’s Bazaar.

Él, junto a su compañero Peter Ettedgui, ha sido el encargado de crear McQueen, el documental sobre la vida del controvertido diseñador. “Al público no le importa si las imágenes tienes tienen mala calidad, les importa la emoción que tiene ese metraje visual, o que les esté mostrando algo que desconocían”

Lee, cómo le llamaban las personas cercanas, se ganó pronto el título de l’enfant terrible de la moda. Su historia de chico incomprendido de clase trabajadora del East End que llegó a la cima del mundo sin llegar a salir nunca de su oscuridad personal es una leyenda que se mitificó todavía más si cabe con su muerte.


McQueen era único porque era capaz de crear arte con cada puntada, cada patrón y, sobre todo, cada desfile. Todos sus traumas y su dolor vibraban sobre la pasarela en forma de diseños oscuros, románticos, trágicos y, a la vez, llenos de belleza. Que sus colecciones sean la piedra angular desde la que se narra la historia de su creador es, sin duda, uno de los mayores aciertos de este documental.





El otro, es haber logrado entrevistas sinceras con compañeros, amigos e incluso familiares de McQueen, aunque no todos se han visto con ganas de participar. “Todavía es increíblemente crudo. La muerte de Lee dejó un hueco en el que quedan un montón de conversaciones difíciles”, explicó a Harper's Bazaar Ettedgui.


“Ocho años no es mucho tiempo si estás hablando de duelo. La segunda cosa es que ha habido mucha prensa sensacionalista escrita sobre él. Las dos biografías, que en ambos casos son maravillosas a su manera, lo desnudan de una manera que es casi demasiado para muchos de sus amigos que no querían que se le expusiera de esta forma”, aclaró el director.



El documental aborda también otra faceta de McQueen que trascendió mucho menos que la de genio creativo: su capacidad como hombre de negocios. “Estaba al nivel de Zuckerberg, dijo Bonhôte. “Jugó con un conglomerado de empresas, vendió el 51% de su compañía a los 31 manteniendo el control creativo y ganaba muchísimo dinero por sus shows, además de un salario más que saludable. Nada mal para un chico que dejó la escuela a los 15”.


Sarah Burton, actual directora creativa de la casa y discípula de McQueen durante años, puede verse en las imágenes del documental junto a su jefe, pero decidió finalmente no hablar para la película. “Bastante acertadamente la marca dijo, ‘no, queremos concentrarnos en Sarah Burton y en el futuro’”, contó Ettedgui.

De hecho, hay una antigua entrevista de McQueen en la cinta que podría hacer a los actuales trabajadores de la marca sentirse un tanto incómodos: “Si alguna vez dejo la compañía, quemaría el edificio”, dijo el diseñador.


Aunque los directores del documental tienen dudas de que esta fuese la reacción real de McQueen. “Creo que dijo eso porque sentía que el alma de su trabajo eran los desfiles, que eran autobiográficos”, aclaró Ettedgui. “Dicho eso, se ve a Sarah Burton trabajando a su lado en el documental, y mi sentimiento es que a él le hubiese encantado que hubiesen tenido el valor de escoger a alguien ‘sin nombre’, alguien que nadie conociera fuera de McQueen, para ser la persona que tomase el relevo”.



El documental de McQueen se estrenará el 13 de julio en Estados Unidos, pero de momento no tenemos confirmado que vaya a llegar a las salas de España.




[Vía Harper’s Bazaar]

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