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Artículo Dinamarca propone incluir el impacto climático de los alimentos en su etiqueta Food

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Dinamarca propone incluir el impacto climático de los alimentos en su etiqueta

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Kevin Laminto
 

Sabemos cuántas vitaminas, calorías y azúcares tiene lo que comemos. Pero, ¿y lo que dañan al medio ambiente?

Rosa Molinero Trias

09 Octubre 2018 11:13

Dinamarca quiere dar un paso más para informar a sus ciudadanos sobre lo que comen: el ministro de Medio ambiente, Lars Christian Lilleholt, ha propuesto añadir una etiqueta que informe del impacto medioambiental de los alimentos.

“Queremos proporcionar a los consumidores los medios para evaluar en el supermercado el impacto medioambiental de los productos”, afirmaba el ministro.

El grupo de interés Danish Agriculture & Food Council ha celebrado la propuesta, aunque considera que deben tenerse en cuenta una serie de aspectos. Por ejemplo, indicaban que a pesar de que un refresco pueda tener un impacto medioambiental bajo, no es algo que puedas consumir a diario. Es más, habría que tener cuidado para no fomentar el consumo de productos que respetan el medioambiente pero cuyo abuso es perjudicial para nuestra salud.

El concepto no es nuevo: la organización Slow Food y también otras asociaciones ecologistas hace décadas que proponen una alimentación km.0, es decir, que priorice el consumo de alimentos locales, cultivados en un radio de kilómetros cercano, para así reducir la huella de dióxido de carbono producida por el transporte.

Según Johan Dal, director de Slow Food Copenhaguen, en general, "un etiquetado tal, bien gestionado, sería fantástico". No obstante, añade que la propuesta del ministro es de cariz voluntario, "lo que significa que si un producto es demasiado dañino para el medioambiente, la compañía puede decidir no etiquetarlo", algo que haría caer las buenas intenciones del gobierno en saco roto.

"Si el gobierno tiene un interés genuino en crear una etiqueta significativa, deberían trabajar con la sociedad civil y las organizaciones sin ánimo de lucro, no solamente a los lobbys de la industria. Si de verdad el gobierno quiere crear un cambio y no solamente lavarse la cara con las premisas ecologistas, deberían fijarse en la industria láctea y porcina danesas, y en el hecho de que la de Dinamarca es una de las agriculturas más intensificadas del mundo", sentenciaba Dal.

Los parlamentarios deberán votar la propuesta para que se incluya dentro del nuevo paquete de medidas para afrontar los nuevos retos climáticos que el gobierno presentará esta semana.

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