Los ojos, el color de la piel, la forma redondeada y las grandes aletas que tiene pegadas a la cabeza, que bate como grandes orejas para nadar: es el hermano perdido del personaje de Disney
No hace falta ser un experto en octópodos para entender las razones por las que este pulpo es conocido como Dumbo. Los ojos, el color de la piel, la forma redondeada y, por supuesto, las grandes aletas que tiene pegadas a la cabeza, que bate majestuosamente, en un gesto extrañamente parecido al que hacía el elefante de Disney para surcar los cielos.
Dumbo, el pulpo, habita en la oscuridad más honda del océano, entre 2.000 y 5.000 metros de profundidad, por lo que rara vez se cruza con alguna expedición humana y, mucho menos, se deja filmar con esta facilidad. Pertenece a la clase de los grimpoteuthis, un género de moluscos cefalópodos, que se cuenta entre las más desconocidas y extravagantes, aunque no entre las más peligrosas.
La improbabilidad de cualquier avistamiento de pulpos Dumbo es la primera razón por la que esta grabación resulta excepcional. Los tripulantes del Nautilus, que son los responsables del vídeo, estaban embarcados en una expedición muy diferente: buscaban las montañas marinas Davidson, que es el nombre con el que se conoce un volcán submarino que se encuentra en la Bahía de Monterrey, en la costa de California.
Pero existe una segunda razón que explica que los tripulantes de la embarcación reaccionaran con gritos de alegría. No sólo es prácticamente imposible ver a un Dumbo, sino que casi nunca se había podido documentar la existencia de un ejemplar tan grande.
(Imágenes del pulpo Dumbo)
Si tenemos en cuenta que la mayoría de animales de esta especia acostumbran a mediar unos 20 o 30 centímetros, en comparación este Dumbo es gigante, pues mide más de 60 centímetros, el doble de la longitud normal.
Las imágenes del pulpo fueron grabadas con un instrumento especial que descolgaron desde el Nautilus, y que pudo descender hasta los 3.313 metros de profundidad. Es un documento de gran valor, especialmente si tenemos en cuenta que el Dumbo se paseó alegremente delante de la cámara, mostrando poco a poco toda su anatomía, así como una variada gama de movimientos.
Por si todo esto fuera poco, la luz del foco que hacía posible la grabación le daba un tono pálido a su piel, consiguiendo que una escala de blancos y morados recorriera su cuerpo. Era la confirmación definitiva de lo acertado que resultaba su nombre: este pulpo es igualito que Dumbo.
