Es la segunda huelga de este mes y la más grande en la historia de la aerolínea
Prosigue la huelga de los trabajadores de Ryanair que mantiene en vilo a la aerolínea líder en Europa. Para este viernes, pilotos alemanes, belgas, irlandeses y suecos han convocado la mayor huelga de la historia de la compañía aérea con un paro de 24 horas para protestar contra sus condiciones laborales. Como respuesta, Ryanair ha cancelado cerca de 400 vuelos con destino a estos cinco países, que afectarán a más de 70.000 pasajeros, 14.000 de ellos en España.
Esta es la segunda huelga de los trabajadores de Ryanair en menos de un mes, ambas motivadas por las malas condiciones laborales a los que están sujetos por la compañía aérea.
“Ryanair impone colonialismo laboral, de 'yo vengo y pongo las normas'”, contaba para PlayGround Ernesto Iglesias, responsable de vuelo del sindicato USO Sector Aéreo. A los trabajadores de Ryanair de los distintos países les une una misma reivindicación: conseguir mejores contratos y un convenio regido por los derechos laborales del país donde trabajan y no por los de Irlanda, donde tiene la sede la empresa.
Actualmente, sus contratos laborales les obligan a abrirse una cuenta bancaria en Irlanda. La seguridad social la cotizan también en Irlanda, a pesar de vivir en España, y por tanto ni siquiera tienen derecho de ir al médico aquí a no ser que sea por urgencias.
La huelga ha quedado teñida por la postura de Ryanair frente a sus trabajadores. La empresa, que después de 30 años reconoció, por fin, a los sindicatos el pasado diciembre, llevó a juicio la huelga convocada por la unión de pilotos holandeses VNV cuando manifestaron su voluntad de unirse a la huelga. No es la primera vez que la empresa tenía un gesto de este tipo con su staff: Michael O’leary, su director ejecutivo, levantó la polémica años atrás al decir que antes se cortaría su propia mano que reconocer a los sindicatos.
En esta ocasión, Ryanair ha afirmado que “no cederá” ante las peticiones de los trabajadores “que pongan en riesgo su modelo de negocio”. Además, ha amenazado con reducir tanto su calendario de vuelos en los meses de invierno como su flota de aviones, lo que ocasionaría la pérdida de cientos de empleos.
Respecto a los pasajeros que verán afectados sus vuelos, la aerolínea asegura que ya se ha puesto en contacto con cerca de 25.000 clientes para reubicarles en rutas alternativas o devolver el importe de su billete.
