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Artículo Un lametazo de su perro ha hecho que este hombre pierda sus piernas y casi muera Now

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Un lametazo de su perro ha hecho que este hombre pierda sus piernas y casi muera

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La bacteria, que vive en la boca de la mayoría de nuestros perros y gatos, puede causar un shock séptico que nos lleve a la tumba o nos haga perder nuestras extremidades. Sin embargo, las probabilidades de infección son muy excepcionales

E.M.C.

02 Agosto 2018 13:24

“El lametazo de tu perro podría matarte” rechina a clickbait a más no poder, pero la trágica historia de este hombre de Wisconsin demuestra que se trata de una realidad médica.

Greg Manteufel, un amante de los animales y las motos de 48 años, comenzó a sentirse mal el pasado 27 de junio. “En cuestión de horas desde que empezaron los síntomas, el cuerpo de Greg empezó a entrar en shock séptico”, explica su familia en el GoFundMe que han abierto para cubrir sus gastos médicos. “Una vez Greg fue admitido en el hospital confirmaron que tenía sepsis”.

La sepsis, o septicemia, es una afección médica grave en la que el cuerpo responde de forma fulminante a una infección. Incluso con los recursos médicos que tenemos hoy en día, muchos de los que llegan al hospital con sepsis no viven para contarlo.

El shock séptico es la peor complicación que puede tener la sepsis. Las reacciones pueden pasar por un disparo en la presión sanguínea, fallo orgánico, daño en los tejidos y, en consecuencia, la muerte. La privación de riego sanguíneo a las extremidades puede llevar a la necrosis y la gangrena, no dejando a los médicos otra opción que la amputación para salvar la vida de los pacientes.

En el caso de Manteufel, primero tuvieron que cortarle los pies. Después, las piernas por debajo de la rodilla y, finalmente, las manos. Ahora mismo están luchando por salvar su nariz.

La bacteria que produjo la infección se llama Capnocytophaga Canimorsus, y vive en la boca del 57% de los gatos y el 74% de los gatos sanos. Aunque la transmisión a través de una mordida es mucho más probable, puede transmitirse con un lametazo, y una bacteria que en ellos no es perjudicial en nosotros puede producir, según un estudio del National Center for Biotechnology Information, “sepsis severa y shock séptico fatal, gangrena de los dedos y las extremidades, bacteremia elevada, meningitis, endocarditis e infecciones oculares”. Aun así, a pesar de el elevado porcentaje, las probabilidades de que esta se trasmita son realmente bajas. Lo mismo sucede en el caso de los perros, como han querido aclarar los expertos. Los casos de infección registrados son realmente excepcionales. 3 de cada 10 personas infectadas por esta bacteria mueren, por norma general en las primeras 48 o 72 horas tras la contracción.

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