Las cláusulas de embarazo no deberían existir en el deporte profesional, pero siguen estando presentes en la mayoría de clubes profesionales.
Las mujeres deportistas ya no las ven en sus contratos, pero cuando fichan por cualquier entidad estas dejan claras las condiciones: si se quedan embarazadas suelen ser despedidas "de mutuo acuerdo" quedándose sin la alta en la Seguridad Social.
Eso significa que tras dar a luz tienen que buscarse la vida para que les fiche cualquier equipo.
Ante esta injusticia laboral, el Congreso -a través de la Comisión de Igualdad- ha aprobado una iniciativa que exige al Gobierno realice las "modificaciones legislativas pertinentes" para "prohibir de forma expresa" la introducción de las cláusulas antiembarazo a las deportistas profesionales y amateurs.
La iniciativa ha salido adelante con los votos a favor de todos los grupos -ERC, PSOE, Ciudadanos y Unidos Podemos-, a excepción de la abstención del PP. El Congreso también le pide al Gobierno la necesidad de impulsar las inspecciones que sean necesarias para detectar y sancionar las cláusulas antiembarazo.
El PP se justifica diciendo que "ya hay suficientes armas legislativas para combatirlas".
"Las leyes ya están ahí. La Ley del Deporte establece que a las federaciones y al CSD no les corresponde esa competencia. Es el ministerio de Empleo y Seguridad Social el que ejerce la función de inspector. Y las actuaciones de la Inspección de Trabajo en materia de igualdad son un área de atención permanente", asegura Carmen González Guinda, diputada del partido del Gobierno.
El resto de grupos no entiende esta postura e insiste con el cambio legislativo.
"No puede ser tolerado que en el siglo XXI el embarazo sea uno de los supuestos que permitan la resolución unilateral de un contrato, no podemos tolerar que para una deportista quedarse embarazada sea equiparable a dar positivo en un control antidopaje", asegura Ester Capella de ERC. "Por desgracia vemos como al Gobierno le falta liderazgo en esta iniciativa. Tendría que tener una actividad más proactiva, estar con las deportistas hablar con ellas, ayudarlas", ruega Rodrigo Gómez, diputado de Ciudadanos.
Habrá que esperar para ver cómo obra el gobierno de Mariano Rajoy, pero no pueden pasar de puntillas por una problemática que toca de pleno la economía sumergida y las relaciones contractuales no declaradas.
Es la oportunidad perfecta para poner fin -en parte- a la precariedad laboral de las ligas profesionales femeninas.
