Una nueva y controvertida idea de esta bloguera, firme defensora del veganismo, que asegura haber ganado en salud tras un año en la selva
No llevar nada. Únicamente su cuerpo como equipaje. Esta es la decisión que tomó hace un año una conocida y controvertida youtuber y bloguera, firme defensora del veganismo, quien lleva 10 años contando en las redes su pérdida de peso, sus polémicas dietas extremas y sus rutinas de ejercicios . Su nueva y disparatada idea era "dejarlo todo" e irse a vivir a la jungla con su pareja. Olvidarse de la civilización y de las comodidades que le ofrece una vida en la ciudad, pero sin renunciar a sus fotos, a sus vídeos y a su presencia en las redes sociales.
A sus 37 años, la australiana Leanne Ratcliffe, antes también conocida como Freelee the Banana Girl, hizo las maletas —imaginamos que le dieron poco trabajo, a juzgar por la poca ropa que luce en las fotos—, y se marcho con su novio a una jungla perdida en algún remoto lugar de Sudamérica. En sus últimas instantáneas, la popular activista por la dieta vegana cruda muestra cómo disfruta de su nuevo estilo de vida ‘off-the-grid’.
El wifi no es lo único que ha dejado atrás la 'Banana Girl'. Además de no usar vestimenta alguna —aunque se ha llevado algo prenda de ropa para los días de más frío o por si la necesitara en caso de urgencia—, Leanne ha dejado de depilarse el cuerpo, no se maquilla y no hay rastro de gel o champú en sus baños en el rio. Un adiós a los cosméticos con los que dice haberse ahorrado la nada despreciable cifra de 4.000 dólares en un año.
"Dejé una situación insalubre y sentí la traición aplastante del corazón del que más amaba y en quien más confiaba. Estaba totalmente aturdida en un punto, tratando de entender mi parte en todo eso ", defiende la australiana como detonante de su drástica decisión.
Ahora asegura ser feliz cultivando sus propios alimentos en medio del bosque (nada de "comida cocinada"), tejiendo sus propias esterillas naturales para dormir y disfrutando de un estilo de vida minimalista en una pequeña y rudimentaria cabaña de madera.
Lo que no sabemos es si esta vuelta a los orígenes del hombre forma parte de un nuevo recorrido vital de la propia Leanne o bien obedece a una de sus estrategias de marketing para promocionar su ya polémica presencia en redes sociales.
El pasado año ya le dedicamos unas líneas gracias a uno de sus polémicos vídeos —más de un millón de personas lo vieron— en el que celebraba sus dietas extremas. Concretamente, se alegraba de su pérdida de periodo menstrual; un signo inequívoco de enfermedad para cualquier médico al que se le pregunte.
“Muchas chicas tienen estas reglas tan fuertes, abundantes y dolorosas porque su cuerpo está intoxicado o tienen una dieta tóxica. Por eso tienen la regla, porque mediante la regla su cuerpo elimina las toxinas”, defendía sin rubor ninguno.
El problema no reside tanto, que también, en las creencias engañosas y peligrosas para la salud que esta chica tenga, sino en que plataformas mediáticas como Youtube, con miles de millones de seguidores, le den un altavoz para esta propaganda que es vista por millones de jóvenes en todo el mundo.
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