El vídeo más triste que verás hoy es el de este grupo de gente besando un coche

Si te das prisa, aún puedes ver el directo de este despropósito: en un concesionario de Austin, Texas, un grupo de personas están besando dos coches Kia Optima. Los que quedan, llevan haciéndolo desde ayer a las 08:00 AM, hora americana. ¿Qué para qué? Para ganar uno de los coches, claro.

“¿Estáis emocionados, chicos?”, le preguntaba una azafata de Kiss FM, los responsables últimos de ésta, una de las postales más deprimentes que ha dado Internet en lo que va de año. “Aunque tengáis los labios pegados al coche, podéis hacer ruiditos”, les reprendía, al ver que ninguno de los concursantes le hacían caso.

Si se cumplen las marcas de otros concursos similares, estos pobres diablos podrían tirarse hasta 50 horas con los morros pegados a la carrocería del coche.

De esas posibles cinco decenas, a continuación podéis ver hora y media.

Kiss FM, en una muestra de humanidad que no se veía desde La Lista de Schindler, permite a los concursantes hacer una pausa cada hora —cada vez que la disfrutan, la gente que participa en el chat en directo del vídeo entra en pánico, creyendo que se han perdido el desenlace de esta historia.

Aunque el vídeo deprime a niveles post-coitales, hay algo en él que hace que no puedas dejar de mirarlo: es como una película de ciencia ficción mala, donde los aliens tienen imanes en la boca. Es como el Muro de las Lamentaciones en la era del turbocapitalismo.

Qué vergüenza conducir el coche luego. O quedar segundo, con los labios cortados por el esmalte de la pintura.

La iniciativa, por cierto, se llama Kiss a Kia (Besa un Kia), aunque no descartamos que los participantes del concurso, durante el mismo, hayan desarrollado odios ancestrales hacia esta marca de coches.