Carlo Alberto Capella, exdiplomático en Washington, es el primer clérigo que juzga la Santa Sede por posesión y distribución de material pedófilo
Después de décadas de mirar para otro lado en las denuncias de abuso sexual en todo el mundo, un tribunal del propio Vaticano ha condenado en su sala por primera vez a un sacerdote italiano por por poseer y distribuir pornografía infantil. La sentencia se dictó el pasado sábado.
En el banquillo sentaron al Monseñor Carlo Alberto Capella, de 51 años, sentenciado a 5 años de prisión y a pagar una multa de 5.000 euros. Capella, exdiplomático de la Santa Sede en Washington, fue retirado de EEUU después de que el Departamento de Estado estadounidenses informara al Vaticano de una “posible violación de las leyes relacionadas con imágenes de pornografía infantil”.
Las autoridades de EEUU habían intentado quitarle su inmunidad diplomática para imputarle posesión de pornografía infantil. Al ser funcionario del Vaticano y pertenecer a su jurisdicción, el Fiscal de la Santa Sede, Gian Piero Milano, llamó transferir al sacerdote para juzgar su proceso.
El religioso admitió en la sala que había cometido “errores” en un momento en el que estaba pasando por una crisis personal tras ser enviado Washington. Capella justificó que ese “conflicto interior fue el origen de actos compulsivos de consultas impropias en internet" de "cosas" que hasta entonces no habían atraído su "interés", en sus propias palabras. "Me equivoqué. Subestimé la crisis que estaba atravesando y pensé que podría gestionarla solo", añadió en su defensa.
Carlo Alberto Capella, sacerdote condenado a cinco años de prisión por posesión y distribución de pornografía infantil
Al sacerdote se le investigó porque pedía en la red imágenes de niños de entre 14 y 16 años y en su ordenador se encontraron vídeos con “actos explícitos”. Es el primer religioso al que se juzga con la ley aprobada en 2013 en la Santa Sede que criminaliza la posesión y distribución de pornografía infantil.
Capella entrará a una cárcel dentro del Vaticano, donde se encuentra bajo arresto desde el pasado 7 de abril. Antes de su cargo en Washington, trabajó en Hong Kong, India e Italia.
Hasta la fecha, el Vaticano solo había abierto anteriormente un proceso contra el exarzobispo en República Dominicana Jozef Wesolowski, acusado en 2013 de pagar a niños por actos sexuales y posesión de pornografía infantil. Wesolowski falleció dos años después antes de que hubiera comenzado el juicio.